Presentación

  Hoy, domingo 17 de febrero de 2013, me parece un buen día para iniciar de nuevo. Para retomar el proyecto que hace algún tiempo comencé y que me fue arrebatado sin previo aviso hace poco más de un año por la DMCA, cuando la iniciativa de ley SOPA se encontraba en su punto más crítico y miles de blogs y servidores fueron borrados de la faz de internet.

Mientras que muchos de estos sitios fueron removidos sin justificación alguna, el mío fue eliminado por infringir derechos de autor: tenía varias decenas de discos disponibles para su descarga gratuita. Porque si de algo se hablaba en el antecesor de este blog, era música. Harta música. 

Para aquellos que en su vida habían escuchado palabra sobre este sinsentido (léase: todos) y no tienen idea sobre qué carajos hablo, les explico: éste era un blog dedicado a la reseña de discos musicales. En la mayoría de los casos, cuando se abordaba a un determinado grupo o artista, se procuraba reseñar poco a poco toda su discografía. Se repasaba su trayectoria en orden y se le otorgaba a cada trabajo una calificación que intentaba darle al lector una idea aproximada acerca de la calidad de la grabación.

En el antiguo sitio se había acumulado una aceptable cantidad de discos y bandas reseñadas. Las entradas superaban el centenar. Los seguidores con cuenta de Blogger eran, sino mal recuerdo, alrededor de 70, y las visitas al blog iban en paulatino ascenso. Gran parte de éstas se debían a la descarga gratuita de los discos comentados, pero eran visitas que ayudaban a la página, al fin y al cabo. 

El blog no era, ni de chiste, la gran cosa, pero me sentía hasta cierto punto satisfecho con su desempeño. Sin embargo, y para no hacerles el cuento largo, un día llegó la DMCA y se lo llevó todo a la mierda.

Las indirectas de Beck Hansen

Hoy estoy de vuelta con este impresentable espacio. Las cosas han cambiado bastante en Blogger: los mejores días de la plataforma han quedado atrás. Viejos conocidos han seguido adelante con sus proyectos, o bien, les han dado una digna sepultura. La era de los blogs terminó hace tiempo. Por mi parte, sigo aquí aferrado, por lo que trataré de que este nuevo blog sea fiel al concepto del original. Aunque, vale la pena mencionar, habrá algunos cambios significativos, más por necesidad y practicidad que por otra cosa. 

La modificación más importante es que ya no se incluirán links de descarga de los discos reseñados. El motivo: evitar que la página sea cerrada de nuevo, pues aquella fue la razón principal de que el sitio se muriera ya una vez. Sólo se compartirán discos bajo petición, pero no aquí, sino por otros medios. Hay que tener presente que la intención original del blog era compartir la música de la que aquí se habla.

Yo, cuando el viejo blog fue exterminado.

Las entradas serán ahora un poco más breves y el sistema de calificaciones será cambiado al sistema gringo de letras; es decir, A+, A, A-, B+, B, B-, C+, C, C-, y así hasta la F. El motivo es que, si ya de por sí el hecho de otorgar una calificación numérica es algo en extremo subjetivo, el sistema de números me parecía excesivo y muy cerrado. Aunque, de todos modos, lo mejor es no prestar mucha atención a las calificaciones, pues, después de todo, el valor de cada álbum se lo otorga cada uno y es intraducible a números o letras.

No obstante, se mantendrá el viejo sistema de colores en el listado de canciones (rojo = canciones de escucha obligada, negro = canciones muy decentes o buenas, y azul = canciones de relleno o de plano malitas), tomado prestado, claro, del maese George Starostin.

Trataré de actualizar el blog con frecuencia, reconstruirlo poco a poco y retomarlo hasta donde se dejó hace ya más de un año. Llevarlo hasta donde se pueda.

Un año y medio de ausencia podría no parecer mucho tiempo, pero, al menos para quien escribe esto, se siente como una eternidad. Mas las ganas de escribir y compartir son mayores, así que aquí estamos una vez más. No sé por cuanto tiempo ni si a alguien le interese realmente, pero por lo mientras, habrá que soportar un rato más a su abominable escribidor. 

Ya lo dijo aquél cuyo nombre empieza con 'L' y termina en 'enny Kravitz': esto no se acaba hasta que se acaba. Sin más que decir, les doy la bienvenida al nuevo sitio. Espero les desagrade lo suficiente.

«It's evolution, baby!»